#Post Title #Post Title #Post Title #Post Title

Buscar

Localidades





Til Til


Habitantes: 5.996 (Censo 2002)



Vicuña Mackenna, en sus textos, señala que Til Til es una de las aldeas más antiguas de Chile y no ha dejado jamás de serlo. Destaca que no ha desaparecido como otros asientos de minas en el norte del país.



El hecho histórico más relevante para esta localidad es ser la tierra que cobijó la muerte de Manuel Rodríguez, asesinado el 26 de mayo de 1818, y por la cual es reconocida en todo el territorio nacional.



Til Til , tambien, se caracteriza por sus minas. En 1877 existían 51 minas, 11 lavaderos y 6 trapiches. En esos tiempos, la producción anual de todas las minas de oro del mundo era de 100.000 marcos en cuya producción Chile ocupaba el tercer lugar con 11.000 marcos anuales. Según la medida que compraba la casa de moneda en Santiago entre 1879 y 1881, Til Til obtuvo el tercer lugar de producción con 24 kilos con 055 gramos de extracción de oro.



El boom de la minería en Til Til fue en 1955. Llegaron personas de todas partes, principalmente del Norte de Chile debido al cierre de las salitreras. Según pirquineros de esos tiempos,La Rabayana,La María, Mata Macho,La Marquesa, Puntilla de Cobre, entre otras, fueron de altísima ley. Una de las pocas plantas concentradoras que sigue funcionando es La Marquesita Abandonada (parte de la Marquesa que trabaja desde el año 1922).



En 1960 se abrió una sucursal de la Caja de Crédito Minero en Ventana (fue los inicios de ENAMI) lo que limitó el poder comprador y la minería en Til Til decayó, la mayoría de la gente se fue a Santiago. Los pequeños mineros se tuvieron que dedicar a actividades relacionadas con la ganadería y la agricultura.



En 1980, debido al duro período de cesantía que vivió Til Til, la Municipalidad se contacta con Oscar Sagua, más conocido como “Sagüita”, un pirquinero oriundo de Ovalle que llegó a Til Til en la década del 50 a trabajar en la mina de Polpaico sacando caliza para el cemento.



La idea era construír un lavadero de oro que recogiera el mineral acolchado en los tiempos del boom de las minas en Til Til.



Luego de conseguir los recursos en el Ministerio de Minería, se contruye un lavadero en el sector de El Atajo, este tenía 2 secciones y dio trabajo a más de 500 personas entre hombres y mujeres. Se mantuvo en funcionamiento por casi 5 años.



Son muy pocas las minas que siguen en funcionamiento y en la actualidad, el Liceo Polivalente C-82 de Til Til tiene un laboratorio minero que entrega antecedentes gráficos de la realidad minera de la comuna.



Entre los lugares de interés de esta localidad se encuentran el Monumento a Manuel Rodríguez, la Media Luna de Til Til, el Estadio Municipal, la Capilla de la Merced, el Cementerio de Til Til, el Edificio Consistorial (edificio municipal), Avenida María de la Paz, la Plaza de Consistorial y la Biblioteca pública Municipal de Til Til N°398.



__________________________________________________________________________________________



HUERTOS FAMILIARES


Habitantes: 2.993 (Censo 2002)



Fundada el 24 de abril de 1973, nace de la necesidad de algunos trabajadores de la fábrica de Cementos Polpaico, en Cerro Blanco, de tener una parcela en donde poder establecerse. Se forma una Cooperativa que compra un terreno que era parte de Santa Matilde, llamada potrero El Carmen (terreno de Marinovich) y es dividido entre los socios para la construcción de sus viviendas con una chacra colindante. Se postula a una caseta sanitaria como parte del proyecto de autoconstrucción. El territorio tiene la particularidad de estar formado por manzanas permeables y extensas medidas. En sus inicios sólo había 10 familias, quienes son los fundadores y que con su propia mano de obra, hombres y mujeres, contruyeron cada una de las calles.



Con la necesidad de celebrar el día del Señor, la escuela, ubicada en 2 Sur con 3 Norte, se utilizó para celebrar las misas. Esto hasta la construcción de la capilla, la que culminó para la fiesta de Nuestra Señora Del Huerto, el 8 de septiembre de 1880.



_____________________________________________________________



POLPAICO


Habitantes: 2.346 (Censo 2002)



Esta localidad rural ya en 1874 era conocida por la cal que aporta a la construcción del Palacio de La Moneda y el Puente Cal y Canto.



Según Vicuña Mackenna, fue un fundo concedido a doña Antonia de Navia en tiempos de Pedro de Valdivia, famoso por sus rodeos, sus corderos y sus espinales, uno de los más antiguos y valiosos de Chile. Y debe su nombre a dos plantas conocidas que se dan en la zona: el poll (achira) y el paico, hierba indígena medicinal para el dolor de estómago.



Lo que posteriormente fue conocido como la hacienda de Polpaico, llegaba hasta Santa Matilde y perteneció a la familia Lecaros. Marta Lecaros Campino vendió parte de su fundo, donde está la mina de cal.



Al iniciarse las labores de la industria de Cemento Polpaico, en 1955, el territorio comenzó a crecer, expandiéndose más allá de las fronteras cobijadas por la casa patronal de la hacienda de Plazuela (Ex-Hacienda Polpaico), que hoy es Monumento Nacional. En ella se planeó la conspiración de los Tres Antonios, que planteaba establecer en Chile un régimen republicano, cuyo gobierno sería elegido por los habitantes del territorio. Esta conspiración fue ideada por Antonio Gramusset, Antonio Berney, y José Antonio Rojas, los dos primeros de origen francés, y el tercero propietario de la Hacienda Polpaico.


Las primeras casas polpaiquinas eran de barro y paja, en tiempos en que esta localidad fue naciendo en conjunto a las estaciones de ferrocarriles, entre ellas la aún existente, pero fuera de servicio, Estación Polpaico Desgraciadamente, la mayoría de las casa antiguas fueron destruidas para el terremoto de 1985.



Los fundos se dividieron parala Reforma Agraria, pero la gente no tenía recursos para trabajar la tierra, por lo cual, siguieron siendo empleados. Luego, empezaron a pedir créditos, pero como no podían pagarlos debieron vender los terrenos. De la gente a la que originalmente le tocó tierra, sólo queda una familia.



El trabajo era generado gracias a las 10 mil cabezas de ganado ovino, la siembra del trigo y alfalfa y la quema de carbón.



Una mujer oriunda de Polpaico plantea que “…si bien antes había pobreza, la gente podía autoabastecerse criando animales y cultivando la tierra. La vida era sacrificada, pero comunitaria. Se hacían actividades tradicionales comola Trilla,la Coladurayla Capaduraen donde participaba toda la gente. En el fundo había una medialuna y colocaron una cruz, lugar donde se celebraban las misas de campaña…”.



RUNGUE



Localidad rural: 782 habitantes. Censo 2002.



Varias son las versiones del origen del nombre Rungue. Se dice que era el nombre de un cacique de la zona. Algunos lugareños creen que viene de la palabra Runga que quiere decir “Roca, Roca” y se debe a que la tierra es muy rocosa, “…de hecho hay que utilizar explosivos si se quiere hacer un hoyo profundo…”. Pero según los textos de Vicuña Mackenna, su verdadero nombre es Rungui que, probablemente, viene de Rugan (pozo) denominación indígena común en lugares secos.



El lugar se hizo famoso en 1812 cuando un labriego encontró con su arado un rebosadero de “papas de plata”, habían algunas que pesaban 1 ó 2 arrobas. Al conocerse la noticia mucha gente de Santiago vino al lugar. Era tal la muchedumbre que hubo que traer un destacamento de granaderos para guardar el orden. A este hecho se la llamó la “extraña siembra de metal” que “cosechó” de cerca de trescientos mil pesos por día. [4]



Rungue fue una estancia del probo y juez del tiempo dela Patria Vieja, don Santiago Mardones. Con el pasar de los años, el terreno fue dividido y comprado por distintos propietarios.



El presidente del Club de Abuelos de Rungue recuerda que era un pueblo muy chico. “…Nosotros vivíamos en la quebradaLa Leona, según se dice una leona atravesó los cerros desde Huechún y es por eso el sector lleva ese nombre…”.



Era una zona triguera, pero cuando la lluvia fue más escasa se dejó de sembrar. Los trigales se regaban con las lluvias que bajaban por la quebrada de los cerros llenos de agua. Las lluvias permitían que se hicieran pozas que duraban hasta el verano.



Cuando había mucho barro las personas debía buscar el camino a través de la línea del tren. La costumbre era bajar de los cerros para ir a la escuela, a comprar e ir a los fundos que daban trabajo a los lugareños. Además, existía un restorán “El Quita Pena” al que iba la gente a componer el cuerpo.



Alfonso Trivelli, dueño de uno de los fundos, donó un terreno a la municipalidad para que construyera la escuela.



En los años 40 la principal entretención era el fútbol. Uno de los pocos runguinos que queda, recuerda que “…entre julio y agosto Eliodoro Moreno empezaba a recolectar plata para las golosinas de los niños del 18 de septiembre, cuando se hacía una gran celebración (…) se juntaban chauchitas y se hacían lindas fiestas…”. Los dueños de fundos regalaban corderos y ofrecían grandes comidas. Las personas de la localidad se preocupaban de cuidar y mantener hermoseadas las casas.



Si bien los fundos daban trabajo a los lugareños, se dice que la afición minera da vida a esta localidad. Se conocen los textos de Vicuña Mackenna a lo que se suma la construcción del camino Rungue-Til Til, en 1930, tiempos de resplandor para la explotación en un grupo de minas ubicadas casi a 5 kms. de la estación de ferrocarriles de Rungue, en terrenos pertenecientes al fundo de doña Herminia Caldera.



Con la llegada del tren al pueblo la minería y el comercio se vieron bastante favorecidos. De hecho, los productos originarios de la zona como quesos de cabra, pan amasado, conejos y flores silvestres, eran ofrecidos en las distintas estaciones de la provincia.



Sin lugar a dudas, la minería trajo muchos beneficios al sector y de alguna forma permitió la formación de Rungue. Desafortunadamente, la llegada de la empresa Refimet, que ya no funciona, dejó un tremendo daño ecológico provocado por la contaminación con arsénico de las aguas del tranque, construido en la década de los 50 para el regadío de toda la comuna.



MONTENEGRO



Localidad rural: 695 habitantes. Censo 2002.



En algún momento se pensó que la sombra de la luna sobre los bellos contornos de los cerros que rodean Montenegro era el origen del nombre del lugar, pero al igual que la mayoría de los pueblos de la provincia, era una hacienda que pertenecía a don José Montenegro, quien, además, le llamaban el “mano negra” a causa de una mancha oscura que tenía en el revés de una mano.[5]



A pesar de ser secano era una zona triguera, especialmente en su ensenada que se extendía hacia el oriente y por donde pasaba el sendero de caballos que conducía a Los Andes.



Por las minasLa Paloma,la Fortunay El Guindo (la cual se sigue trabajando pero a menor escala) esta localidad conservó por mucho tiempo su carácter de asentamiento minero. La extracción de minerales perduró por años, pero su mayor producción se centró en tierras de tipo arcillosas y materias para la creación de pigmentos y cerámicas.



En 1863 la producción minera se vio favorecida gracias a la llegada del tren que permitió el rápido transporte al puerto de Valparaíso. Su estación fue conocida como la de Quesos de Cabra porque era lo que más se vendía.[6]



La capilla colonial de Nuestra Señora de Lourdes, ubicada en la calle principal frente a la estación, fue diseñada según cánones europeos debido a la influencia de hacendados franceses que poblaron la zona y que financiaron su construcción. La primera piedra fue colocada en 1943. Los montenegrinos se han preocupado de cuidar y conservar los objetos antiguos, como las ropas utilizadas por los curas y el carrito que se ocupaba para llevar a las personas en los funerales.



Una de las personas más antiguas de la localidad y quien fue regidor de Til Til en el período presidencial de Jorge Alessandri, señala que con el fin de apoyar el desarrollo deportivo de los niños, se construyó la medialuna de Montenegro, la cual, por encontrarse al lado de la carretera atrae a los viajeros cada vez que se realiza un rodeo. Esta actividad se ha convertido en una tradición que se celebra cada 12 de octubre.



CALEU



Localidad rural:



Caleu: 463 habitantes.



El Llano de Caleu: 321 habitantes.



Censo 2002.



Kaleu,…Kaleutun, aquello que cambia de condición.



Las piedras perforadas encontradas en las quebradas de Caleu hablan de vestigios ancestrales pre incaicos, que se mezclan con los senderos entre el cerro El Roble y El Garfio que formaron parte del “Camino del Inca”.



Según algunos relatos históricos, cuando las tropas realistas escapaban del ataque de San Martín y O´Higgins, luego de la batalla de Chacabuco, el 12 de febrero de 1817, se dirigieron a Valparaíso a través de Chicauma y en el camino algunos de estos fugitivos decidieron esconderse entre las quebradas de Caleu. Finalmente, fue el lugar escogido para poblar, cultivar la tierra y extraer mineral. De ahí proviene el origen de los apellidos más comunes de Caleu: Astorga, Hidalgo y Vicencio.



Pocas son las familias antiguas que quedan que recuerden la vida de antes y las historias contadas por sus ancestros.



En Caleu se vivía de la leña, el carbón y la nieve. Las nevadas eran tan grandes, como la de 1942 cuando nevó durante 8 días. Se trabajaba pisando nieve, actividad conocida como “tapadura de nieve”. Durante el invierno, en el cerro El Roble, cavaban grandes piscinas que eran rellenadas con nieve entre capas de hojas. A comienzos del verano, se habían transformado en hielo, el cual era cortado en grandes bloques y bajado en mulas a la estación de Llay Llay donde se comercializaba y trasladaba a las fábricas de helados.



Según lo relatado por una oriunda de Caleu “…me crié en casa de adobe, comiendo majao, mote y papas con frangollo (…) Aún cocino con leña y nunca me he enfermado con el humo del carbón…”. Además, recuerda que las trillas duraban 3 días y todos los vecinos ayudaban en las labores.



Entre las verdes laderas se pueden encontrar los rastros de las minas de cobreLa Perlay San Gerardo. Según cuenta un mito popular, una vez encontraron una empanada de oro.



Las minas de Caleu fueron explotadas entre 1960 y 1970. De acuerdo a lo relatado por antiguos mineros de la localidad, en esos tiempos se perforaba a mano y había que carretear600 metrospara dejar en la planicie los minerales extraídos. Para mejorar la producción, debieron hacer una posta cada100 metrosy con tropas de burro se sacaba el material. Pirquineros recuerdan que los mejores carretilleros fueron Fernando Sánchez y el legendario “Mentiras Gordas”.



A quien preparaba las comidas en las minas se le llamaba “Coki”. Los monroes o chocones, que eran unos panes grandes, se convirtieron en parte de la alimentación básica de los trabajadores.



Se dice que hubo muchos minerales de la familia Allende, dueños de las casas más antiguas de Caleu que aún existen y que le dan identidad a la localidad.



Antes de ser construida la primera escuela de Caleu, en los años 60, uno de los recuerdos que salta a la memoria de los más antiguos lugareños, es que don Emilio Hidalgo hacía clases en El Llano y al morir, su hijo siguió sus pasos enseñando a los niños del sector.



De las míticas historias que se cuentan, está la del paso de la francesa, que es un arroyo en donde se presentaba una gallina con pollos y un chancho con cadena que seguía el andar de la gente.



En aquellos tiempos se santificaba a San Manuel y una de las grandes fiestas era Corpus Cristi. La gente se instalaba con pequeños negocios y había un lugar especial para celebrar la misa.



La fiesta del Carmen era una tradición que se fue perdiendo de a poco. Nueve días antes de la celebración, se empezaba con la novena del Carmen, se prendían velas y se dejaban monedas como símbolo de agradecimiento por el trabajo generado durante el año.



Además, todos los años, en el mes de abril, se realizaban misiones, actividad clásica de los católicos en esos tiempos.



La comunidad de Caleu participa en una tradicional fiesta que se celebra en el sector de Quebrada Alvarado el 24 de diciembre en el santuario de Las Palmas. En procesión a caballo llegan al lugar, donde se presentan bailes chinos ascendiendo desde la quebrada hasta el santuario. Los habitantes de Alvarado narran que en sus tierras existe un niño que protege a los comuneros y a sus familias, trayéndoles longevidad y prosperidad en sus cosechas. Se cuenta que la primera vez que se le vio fue en la quebrada “…apareció en un trigal una figurita de un niño de ojos grandes y mirada angelical, una luz clara rodeaba su cuerpecito y al ser levantado roció trigos nuevos…”. Los comuneros, al percatarse de los milagros de este niño y que sus plantaciones eran ahora más abundantes, se sintieron agradecidos y decidieron construirle un santuario nombrándolo “niño Dios” conocido también como “el niño de los pies de trigo”.[7]



En los años 30 Caleu se establece legalmente como comunidad. La población ha crecido siempre en los márgenes que la geografía le permite, cultivando en pequeños terrenos. Actualmente, la mayoría de los terrenos están siendo vendidos por los propios comuneros como “parcelas de agrado”.



Caleu se caracteriza por ser uno de los lugares turísticos de la zona, pero, a su vez, conserva su carácter de “lugar oculto” que lo hace tan particular.



HUECHÚN



Localidad rural: 289 habitantes. Censo 2002



Se destaca por su belleza natural y sus rincones guardan la historia arqueológica de la zona.



Huechún fue un fundo de tierras agrícolas y ganaderas, había ovejerías y cabrerías, se producían quesos y otros productos derivados de la leche. Conla Reforma Agrariaestos terrenos se repartieron entre los trabajadores, formándose una Sociedad Agrícola de siete socios, dueña de una de las construcciones más antiguas, “Llavería Fundo Huechún”, una bodega ubicada cerca de la medialuna.



Según lo relatado por una persona oriunda de la localidad, cuando Huechún era fundo, los sábados se mataban corderos y se repartían a los trabajadores para que se hicieran asados. Recuerda que en esos tiempos la gente construía las ramadas bajo un frondoso algarrobo.



Antiguamente, se hacía majao en vez del arroz y el morocho (maíz) se cocía para ser servido como postre. De las familias más antiguas sólo quedan los Morales.



En los años 40 se construyó una escuela que se derrumbó para el terremoto de 1985 y lo único que queda hoy es una pirca.



Dentro de las historias contadas por los abuelos de los niños de la escuela, están la de la gallina de huevos de oro que salía a pasear por las calles de la localidad y la de las apariciones de 200 caballos corriendo por los campos de Huechún.



Además, en la casa patronal se centró la atención de quienes decían que penaban debido a que hubo 3 personas que murieron en su perímetro.



Hace algunos años la parte que correspondía a la ovejería fue comprada por Codelco Andina, lugar donde fueron descubiertos 53 sitios arqueológicos reconocidos. Para dar a conocer algunos de los objetos encontrados, se construyó un depósito arqueológico, abierto al público, que guarda piezas seleccionadas como tazas de piedra para moler y puntas de flechas.



Como una forma de preservar la reserva natural, se excluyeron1.200 hectáreasde toda intervención. El sector fue enriquecido de flora y fauna, pero es un lugar al que se prohíbe el acceso.



Dentro de los compromisos asumidos por Codelco Andina, mientras esté en la zona, es que cada cinco años debe desarrollar un plan educacional ambiental con dos escuelas de la comuna.



Huechún es una de las localidades de la comuna que se caracteriza por conservar su entorno rural debido a la gran cantidad de parcelas agrícolas, sus caminos interiores no pavimentados y la forma de relacionarse de sus habitantes. Sin embargo, se ve fuertemente afectada por la gran distancia que tiene con los centros urbanos y la dificultad de acceso, tanto a medios de comunicación como a transporte, situación que empeora en temporada invernal quedando prácticamente aislada cuando las condiciones climáticas son adversas.



SANTA MATILDE



Localidad rural: 699 habitantes. Censo 2002



El nombre de esta localidad se debe a doña Matilde Rivera Serrano quien se casó con don Manuel Beauchef, hijo del coronel Beauchef que llegó a estas tierras a pelear con los españoles en los tiempos de Napoleón. En aquella época, lo que hoy se conoce como Santa Matilde, era parte de la hacienda de Polpaico.



Doña Matilde no tuvo hijos y repartió sus tierras entre su hermana, Pastora Rivera, y su sobrina, Carmen Palma, quien fue abuela de Marta Lecaros Campino, madre de Darío Ovalle Lecaros.



Santa Matilde era el fundo (desde Quilapilun hasta Lampa) de los cuatro hermanos Lecaros Campino, quienes se repartieron el terreno de 9 mil hectáreas. Posteriormente, algunos conservaron los terrenos en la familia, otros les fueron expropiados conla Reforma Agrariay otros fueron vendidos.



En esos tiempos se sembraba trigo, el cual, era transportado en bueyes. A pesar de que el camino no estaba delimitado, muchos lugareños recuerdan que “el andar” era lo que hoy se conoce como “coquimbito”. Los viajes de Polpaico a Santa Matilde eran larguísimos, quienes trabajaban en el fundo debían salir a las 6 de la mañana y, una vez en Santa Matilde, se sentaban a comer lo que se conocía como “la galleta de los trabajadores”.



Para poder cuidar mejor el ganado, la gente tenía sus casas en los cerros. Había 25 mil cabezas de ganado de oveja y todo lo que se sembraba estaba relacionado con el ganado. Los terrenos eran regados con el agua del tranque de Huechún, construido en 1932, que en esos tiempos proveía lo necesario para la ladera del Aconcagua.



Cerro Blanco empezó a funcionar definitivamente en 1947. Un poco más abajo, estaba la calería vieja donde había una población grande, que se desarmó cuando el cemento tomó el lugar de la cal. El sindicato de trabajadores del lugar pagó a una profesora para enseñar a los niños de la población y a algunos campesinos que quisieran estudiar. Un agricultor oriundo de Santa Matilde recuerda que en esos tiempos sólo existían las escuelas de Polpaico y Plazuela.



En 1956, años después de que Darío Ovalle llegara a tomar la administración del fundo, se construyó la primera escuela, la cual aún funciona, pero a partir de 1973 pasó a ser escuela pública.



La pulpería ubicada en Cerro Blanco abastecía a distintos lugares con leña y carbón. Por la vieja cuesta viajaban, entre tres y siete días, caravanas de carretas en dirección a Santiago con sacos de leña y carbón para venderlos en la capital.



Según lo que recuerdan algunos matildanos, antiguamente se celebraba el 18 de septiembre en las casas, pero con la llegada de la población a Cerro Blanco se construyó un estadio que dio el espacio suficiente para organizar fondas y rodeos. Se realizaban tradicionales actividades campesinas como juegos y competencias a la chilena, en las que participaban todos los huasos de la zona.



Para muchos matildanos, la existencia de la población de Cerro Blanco abrió las puertas a la cultura, gracias a que se realizaban diversas actividades en que la familia podía compartir, “… era el lugar donde uno podía ir a comprar el diario…”.



Santa Matilde no está exenta de relatos curiosos. Una de las historias contadas por los matildanos es que en el fundo había un galpón muy grande cuidado por rondines, un día se mandó a comprar a uno de los trabajadores y cuando iba por “el bajo” se le acercó lo que él pensó era un perro, pero el mito señala que era un duende que se le aparecía a la gente y la acompañaba en su caminar. El trabajador le dio un puntapié y el duende le devolvió el golpe hasta dejarlo moreteado.



Otra de las historias dio origen a lo que se conoce como el “Algarrobo dela Cubría”. La gente debía ir a pagarse a Polpaico, al otro lado de la línea del tren, y como el camino era largo, una vez recibido su dinero se dirigían a un frondoso algarrobo, que quedaba en el camino, para poder descansar bajo su sombra. Algunos se quedaban dormidos y eran asaltados.



El 1971, cuando se diola Reforma Agraria, los terrenos fueron expropiados y luego se formaron los asentamientos hasta la llegada del régimen militar que terminó repartiendo las tierras. La gente que venía de Santiago compró terrenos y se empezaron a formar nuevamente los fundos.



Quien fuera regidor y alcalde de la comuna en varias oportunidades, cuenta que al repartir los terrenos se reservaba la parte de la casa y se entregaban los potreros, lo que explicaría que existan casas aisladas “…en ese tiempo se podía por ley…”. En el paradero 5 están las únicas tres casas que quedan de aquella época.



Las siembras de trigo (300 cuadras) fueron transformadas en parronales, duraznos y plantaciones de hortalizas. Por lo cual, la actividad económica se ve marcada por la estacionalidad del trabajo.